El proyecto consiste en la extensión con un nuevo comedor, altillo, y dormitorios comunales. El edificio existente era una antiguo establo de tapial. Gracias al uso de micropilotes en el interior de los muros se pudo reutilizar la antigua estructura original. Este era un requisito debido a la alta actividad sísmica de la zona, ya que el local está en las faldas de un volcán.


El proyecto es realizado utilizando materiales extraídos de la misma parcela y construida por voluntarios habitarán finalmente.